En letras existo.

Me he olvidado de escribir, por no decir que me he olvidado de mi misma.
La verdad es que son sinónimos implícitos. Donde están mis letras existo, si alguien me lee
aunque el lector no esté consiente, se convierte en cómplice de mis fantasías, locuras y desvaríos.

He decidido hoy romper con el silencio, atreverme a contar de nuevo esas historias que llenan
mis sueños de pretextos. El tiempo no es mi aliado, pero no lo culparé del todo. Lector, he vuelto, con mis historias y cuentos, con mis textos y sueños. He vuelto, porque si no escribo, no existo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El observador

Sólo hazlo.

Día de campo